¿Alguna vez te preguntaste sobre la importancia de los carriles de bicicletas?
Los carriles bici ayudan a los ciclistas a respirar un aire mejor.
Hoy en día la contaminación es uno de los grandes desafíos que las ciudades deben combatir, y aún más sabiendo que en 2050 se estima que el 70% de la población mundial vivirá en núcleos urbanos. El uso de la bicicleta es uno de los más extendidos a nivel mundial, mucho más ahora que se potencia el uso de vehículos no contaminantes. No obstante, en muchos casos nos encontramos con que grandes ciudades no cuentan con carriles bici preparados para ayudar a la accesibilidad.
El problema es que en muchos casos, la escasez de carriles bici nos obliga a cambiar de idea. Hoy en día, es un acto de valentía coger la bicicleta para ir a algún lugar, más teniendo en cuenta que no todas las calles están preparadas para este tipo de transporte.
Si ampliamos el número de carriles bici en todas las ciudades, las personas que aprovechan este medio de transporte estarán más seguras de tener su propia zona delimitada y se podrá aumentar el número de ciclistas en las calles para mantener la sostenibilidad y bajar los niveles de contaminación.
La importancia del carril bici.
-Un ciclista que se mueve a 1,5 metros de distancia de un coche (distancia que puede ser proporcionada por un carril bici) respira un 30% menos de hollín que aquel que circular por la misma vía.
-Un carril bici segregado por setos reduce un 6% la presencia de los principales contaminantes.
-Un carril bici pavimentado con un pavimento fotocatalítico de hormigón puede llegar a reducir los contaminantes urbanos más comunes en un 60%.